Situado en una zona urbana muy concurrida, este restaurante ocupa una casa estilo Tudor de conservación arquitectónica. La respuesta arquitectónica fue la de conservar en lo posible los espacios originales integrándolos mediante aperturas intencionadas. Unos paneles de madera en varios colores y texturas con luz indirecta, unifican las diferentes ventanas originales de la casa. En el segundo piso, una cava envuelve un espacio que correspondía a dos habitaciones originales de la casa.
Proyecto: Guillermo Arias. 2004-2005
Colaboración: Gabriel Insignares